Los Tigres de Lafontaine, que días pasados concretó su remate en Azul, ahora llevará a cabo una nueva venta en la Sociedad Rural de General Lamadrid. La cita es este jueves. Un buen momento, entonces, para bucear en lo que ha sido la relación entre la cabaña, la toma de datos y un programa genético que fue moldeando un rodeo con 50 décadas de recorrido.
Escuchar extracto de la nota con Adolfo Lafontaine:
“Empezamos a recolectar datos en el año 1989, con tres o cuatro características. Ya pasaron más de 35 años, y fuimos agregando otras, especialmente características que hacen a la calidad y al rendimiento de la carne. Y últimamente empezamos a agregar otras más, como docilidad”, relató en Mañanas de Campo el Ingeniero Agrónomo Horacio Guitou, asesor genético de la cabaña.
“Además, empezamos con las pruebas de eficiencia de conversión, en las que Juan Adolfo (Lafontaine) también tuvo mucho que ver. Que para resumirlo, es buscar aquellos animales que consumen menos y producen lo mismo”, agregó.
– ¿Cómo se llega a medir la eficiencia de conversión?
– Eso lo hacemos a través de medir el consumo de materia seca y después a partir de sacar el consumo residual y transformarlo en un DEP. Pero después de eso seguimos agregando características. Este año sumamos facilidad de parto y a su vez hay dos o tres características que están en toma de datos.
– ¿En qué están trabajando ahora?
– Juan Adolfo es uno de los que ya está tomando datos en lo referente a pezuñas. En lo que hace a los DEP del ángulo de la pezuña. Y a su vez, otro DEP que es el de Peleche Temprano. Esos están en toma de datos y próximamente se agregarán al convenio.
La palabra de Lafontaine
Tras su intervención, Horacio le cedió la palabra a Juan Adolfo Lafontaine, al que conoció cuando nació el ERA, el programa de la Asociación Argentina de Angus. “Es valioso que sea Juan Adolfo quien explique para qué son los DEPs, porque es va a detallar cómo direccionar un programa genético en una cabaña como la que él tiene, con distintos lotes dentro de un mismo sistema de producción. De hecho, acaba de exponer su programa en el Foro Argentino de Genética con una excelente disertación”, indicó.
– ¿Cómo se usan las herramientas mencionadas por Horacio, y cómo ha sido su experiencia?
– La cabaña Los Tigres la fundamos hace 50 años y hubo 25 que, no digo que trabajamos a ciegas porque lo que usábamos era el ojo y los datos fenotípicos de los pesos, y hacíamos promedios y tercios superiores y tratábamos avanzar, pero fue totalmente distinto cuando vino el ERA. Es decir, el direccionamiento en base a diferencias genéticas esperables en la progenie.
– ¿Qué permitió la aparición del ERA?
– Nos permitió trazar un objetivo, e ir eligiendo padres y transformando las madres para alcanzarlo. Y eso lo hemos llegado a hacer en algo que biológicamente fue un desafío tremendo, que fue trabajar con dos caracteres antagónicos, como son el peso al nacer, gran responsable de la facilidad de parto, y el potencial de crecimiento.
Lo normal con 80% de relación es que los que nacen livianos después no crecen o son animales chicos, y por el contrario, los que nacen con altos pesos, tienen gran potencial de crecimiento por el resto de la vida. Bueno, nuestro desafío en 2001 fue trabajar en esa ventana del 20%. Seleccionamos cinco hembras y usando el trasplante embrionario fuimos generando nuestros propios “rompe curvas”. A la segunda generación ya estábamos en camino firme.
– ¿Y cómo es la actualidad?
– Hoy el 70% de los productos que nacen en el plantel son aptos, sean machos como hembras, para hacer servicio anticipado. Tienen valores DEP de un umbral de seguridad que nos hemos tomado de -07 hacia abajo y el 40% del total de la producción tiene no solo eso, sino que el potencial de crecimiento es promedio o superior al promedio.
Entonces, se ha logrado algo que económicamente tiene altísimo impacto en los sistemas reales y además, por supuesto, uno va llevando en paralelo lo que hace a fertilidad, precocidad sexual, y lo que es muy importante, calidad.
– ¿Cómo se trabaja en la calidad?
– Cuando el ERA incorpora calidad de carne, se empiezan a tomar mediciones ecográficas. Y ahí sí que es muy sencillo: eligiendo padres o generándolos de cada vez mayor área de ojo bife, tampoco vas a seguir al infinito. Una vez que con esa facilidad de parto y potencial de crecimiento logras llevar a los 18 meses los novillos, es decir en pleno verano, a peso Hilton a pasto, y con un área de bife más que suficiente, listo. Llegaste a destino. Entonces salen tus novillos en contra estación con los feedlots que abastecen al consumo y terminan de venderse para cuando entran los nuevos terneros, la nueva camada.
Entonces eso es la genética en acción que te permite poner en valor todos los demás esfuerzos, la calidad y el compromiso del personal, que estén bien pagos y todos los esfuerzos que has hecho en nutrición, sanidad, etcétera.
– ¿Cómo fue el trabajo en lo referido a la incorporación de facilidad de la parto?
– En realidad organizamos un protocolo para tomar datos de facilidad de parto. Se toma el dato sobre toros que preñan a vaquillonas en una escala que va de uno a cuatro, y básicamente los que tienen código uno son aquellas vaquillonas que con determinado toro no necesitaron ningún tipo de ayuda o asistencia. Si bien empezamos el protocolo, tenemos pocos datos de facilidad de parto, unos 40.000 datos. Entonces estamos dando el primer paso, pero es un paso importante gracias a los criadores, que hemos podido incluir esta característica que incluye dos cosas. Porque cuando calculamos facilidad de parto, usamos el peso nacer y la longitud de gestación. Y todo empieza por la eficiencia reproductiva y realmente después que nace viene la precocidad, la calidad y el rendimiento.
Remate
Está dicho, este jueves en Lamadrid, Los Tigres tendrán su segunda venta de primavera con una importante oferta: 55 toros PC; 30 vientres preñados PC y 200 vientres Angus generales para entorar. A cargo de la subasta, que se desarrollará en la Sociedad Rural, estarán Heguy Hermanos, Ansaldo y Cía, y Marcos Matteucci.
La hacienda saldrá en tres cuotas sin interés: 30, 60 y 90 días, o con 60 días libres. Se podrá operar con las tarjetas AgroNación, ProCampo y Caldén, y habrá 300 kilómetros de fleta gratis.
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