Una fiesta, así se puede definir este Cuarto especial de Pasión Ganadera que tuvo de todo: charlas y cena de camaradería la noche del miércoles, un encierre de calidad en invernada y en vientres, más un mercado que pretende terminar el año, a toda máquina, o valores plenos. Así se vivió este remate de la firma Martín y Alonso, que mostró un mercado muy animado, incentivado por un buen encierre.
Atrás quedaron las charlas de Carlos Ojea Rullán, este asesor genético que invitó a todos los ganaderos a cambiar el chip y abrir la cabeza: se necesita dejar de pensar en tamaños u otras cuestiones, hay que hacer kilos de carne por hectárea y dejar atrás algunos vicios y mitos, que el consumo interno enfermó y motivó. Por otra parte, el nutricionista Darío Colombato, mostró los motivos por los cuales, nos falta mucho por crecer y aprender, pensando siempre en el producto final: la carne de calidad, en un camino, rentable.
Con esos argumentos, la mañana del jueves encontró muchos seguidores, con un consumo que mostró “livianitos” a 4450$ en sus máximos, y vacas gordas, arriba de los 3300$.
Las filas de terneros marcaron que calidad, cantidad y algo de plazo, son motivo suficiente para que no haya terneros por debajo del millón de pesos, o por debajo de los 6000$ el kilo, firmeza, manos, pujas, nada faltó para ver como los operadores, no hacen números cuando está la mercadería pretendida.
En la hembra a todos esos argumentos, se sumaron algunos criadores que pujaron lotes para madres, por eso ver terneras de 230 kg venderse a 1.460.000$ es entender que cuando algo se busca, los valores no son la limitante. Dicho en criollo, otra vez, una ternera (con ese kilaje muchos destetan), hace 1000U$, “y que lo expliquen como quieran”.
La continuidad fue para el especial de vientres, donde unas vacas con cría, dieron el primer batacazo fuerte: más de 2 millones de pesos lo que pisa, en una puja en donde nadie aflojaba. Piezas con cría y muchas con más de 30 días de servicio, fueron parte de los argumentos para los valores, mientras que luego vaquillonas angus seleccionadas, tuvieran su mercado y buenos valores.
Un remate para cerrar el año en Suarez para la firma, un verdadero ejemplo de prolijidad, responsabilidad y puntualidad, todos argumentos para que su crecimiento año tras año, parezca no tener techo.
Estos fueron los valores:

Especial de Vientres:

Casa: Martín y Alonso
Plaza: Feria Martín y Alonso Coronel Suárez
Total Gordo, invernada y cría: 1772
Martillo: José Anselmo Doartero y Felipe Alonso
Plazos: 30 y 60 días
Carlos Bodanza- Damián Hinding
Infosudoeste- Entre Surcos y corrales


























