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Movimientos de hacienda: las nuevas exigencias sanitarias de SENASA para 2026

Más control sanitario, nuevos criterios de movimiento y cambios en brucelosis: las claves que los productores deben conocer para 2026.

Por Dr. Adrián Cutini – Jefe Regional SENASA

A partir del 1° de enero de 2026, el sistema sanitario ganadero argentino comenzará a transitar una etapa de mayor control y vigilancia epidemiológica, en línea con las exigencias de los mercados internacionales y el crecimiento de las exportaciones de carne. Identificación animal, brucelosis bovina y cambios en los criterios de control de movimientos serán algunos de los ejes centrales de esta nueva etapa.

En diálogo técnico, el Dr. Adrián Cutini, jefe regional de SENASA, explicó los principales puntos que los productores, consignatarios y operadores deben conocer para evitar inconvenientes en el traslado de animales y adecuarse a las nuevas exigencias.

Escuchar la nota completa con el Dr Adrián Cutini:

Brucelosis: cambia el criterio de control de movimientos

Uno de los cambios más relevantes tiene que ver con la aplicación estricta de la Resolución 67/2019, vinculada al control de brucelosis bovina en los movimientos de animales.

Hasta ahora, el sistema SIGSA exigía el certificado sanitario (sangrado) únicamente cuando el motivo del movimiento era la reproducción. En cambio, si una vaca se trasladaba con destino a invernada o faena, el sistema no solicitaba ese requisito.

Desde 2026, el control dejará de basarse en el motivo del traslado y pasará a centrarse en el tipo de destino del establecimiento.

“Si el establecimiento de destino es de cría o ciclo completo, el sistema va a exigir certificado sanitario, independientemente del motivo que se cargue en el movimiento”, explicó Cutini.

Esto significa que:

Vacas, toros y toritos que ingresen a establecimientos con cría deberán contar con certificado sanitario vigente, salvo que provengan de un establecimiento oficialmente libre.

El objetivo es mejorar la vigilancia epidemiológica y evitar el ingreso de animales positivos a rodeos reproductivos.

Recategorización de establecimientos

Desde SENASA también se viene trabajando en la recategorización de los establecimientos, ajustando su clasificación productiva a la realidad sanitaria.

“Había campos registrados como invernada, pero que en la práctica tenían vacas, toros y terneros. En esos casos se los recategorizó como cría”, explicó el jefe regional.

Con el nuevo esquema de control, estos establecimientos recategorizados deberán recibir animales únicamente con certificación sanitaria o provenientes de campos libres.

La “Vaca China” fue el motor para grandes movimientos de vacas a diferentes establecimientos.

Vacuna para brucelosis en animales adultos: una nueva herramienta

Otro punto clave es la ampliación del uso de la vacuna RB51 (Delta PGM) para animales adultos, establecida en la Resolución 936/2025.

Hasta ahora, esta vacuna estaba habilitada solo para establecimientos con focos de brucelosis detectados. Con la nueva normativa, se permitirá su aplicación de manera preventiva en animales adultos (preparto o post-servicio) en establecimientos con estatus sanitario reconocido, ya sea:

Establecimientos libres

Predios negativos

“Es una herramienta más para aquellos productores que, por ejemplo, lindan con campos que tienen problemas de brucelosis y hasta ahora no tenían cómo proteger su rodeo”, señaló Cutini.

La aplicación:

Debe realizarse bajo supervisión veterinaria

Debe estar registrada en la oficina local de SENASA

Forma parte de un plan sanitario oficial, no de una decisión individual del productor

Lo viejo vuelve: Sarna bovina, controles en ferias y eventos concentradores

Cutini también advirtió sobre la reaparición de sarna bovina, una enfermedad que, si bien fue recategorizada, sigue generando problemas operativos.

“Es registrable cuando hay pocos casos y solo se vuelve denunciable si hay una cantidad importante de animales afectados. Por eso, si se detecta sintomatología en ferias o eventos concentradores, el lote no continúa su movimiento y vuelve al establecimiento de origen” apuntó el Veterinario.

Desde SENASA se exige en estos casos la implementación de un programa sanitario con seguimiento veterinario, para evitar la diseminación de la enfermedad.

Un 2026 con más controles y más exigencias

El jefe regional de SENASA adelantó que el próximo año traerá además cambios en:

Identificación electrónica

Estrategia de vacunación, con la eliminación de la tradicional campaña de octubre-noviembre-diciembre

Nuevos esquemas de control sanitario integral

“La clave es anticiparse, informarse y trabajar siempre con el veterinario. El desconocimiento genera errores, y los errores terminan en disgustos”, concluyó Cutini.

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