El Mercado de Cañuelas tuvo su punto cúlmine: 35.320 animales se dieron cita al principal mercado concentrador, dejando claro que por ahora la salida masiva no termina, más allá de venir de una semana corta, de negocios paralizados por Semana Santa y de la imperiosa necesidad de seguir achicando que tienen muchos campos ganaderos y mixtos, donde una vez más se recortan los números de soja y maíz y donde muchos potreros del primer cultivo, terminan en lugar de ser cosechados, con un eléctrico y animales, buscando salvar “la ropa” ante un nuevo quebranto en la agricultura. Justamente, a los motivos de la sequía y achicar los campos, a las vacas vacías que siguen saliendo de los tactos y previendo la llegada del invierno, a los destetes tardíos o tempranos, pero que no van a ser recríados, a todo eso, si faltaban motivos de venta, se le suma la venta de hacienda para cubrir los “agujeros” que dejó la agricultura en muchos campos donde la fina no funcionó y donde la gruesa fracasó, la vaca una vez más termina siendo el financiamiento propio más económico, a la hora de salvar empresas.
Todo esto, es para una previa que en el análisis no permite demasiado, repetir una y otra vez, que solo lo muy bueno se paga en la hacienda de consumo, con mismos valores, con mismos techos y con la necesidad de muchos frigoríficos de encontrar mercadería de excelencia que no abunda. El resto, lo terminado “flojo”, lo sin feedlotear y sin buenas gorduras, todo debajo de los 500$ y muy trabajoso. Mucho novillo flaco, al igual que la vaquillona y lo mismo en la vaca, lo de mostrador y gordo se paga bien, 340 y hasta 350$, todo el resto, cámaras llenas y las manos si bien están, mostraron la Manufa, la China y la Conserva, con más tranquilidad. Solo el toro muestra la misma tendencia de la vaca gorda, con valores de 330 o 340$.
La invernada sigue su curso, con mucho a venta y solo el plazo y la muy buena calidad, logran valores cercanos a los 500$, todo el resto muy por debajo, más para 470-480$ que para arriba, con la ternera en los 430$ y no mucho más, solo esperando que pase el aluvión, donde muy pocas zonas retienen y donde el resto, ya vieron sus primeras heladas y el cálculo de “pasto por delante”, comienza a calcularse, mientras que los picados de maíz o de sorgo, solo quedan para las zonas donde ha habido buenas lluvias o donde la calidad del grano, ya no tiene mucho para dar.
El vientre está en el túnel del tiempo: con suerte se logran buenos valores en la máxima calidad, donde el plazo no abunda y donde cualquier comparación al kilo o la mirada hacia un año atrás, desnuda que la inflación en la “fábrica” bovina, nunca llegó, de hecho en muchas categorías, simplemente retrocede.
Por eso algunos miran ya con preocupación el comienzo de la venta de reproductores, donde los 1200 kgs de novillo, tal vez no sean representativos de los valores y la vara dejada el año anterior, muestra que hay valores muy por encima de ese cálculo y solamente las necesidades de reposición o la capacidad de inversión del ganadero, podrán mejorar valores que hoy, todo el mundo mira de reojo.
Otra semana para ver el mercado hacia el futuro: el que afloje su oferta, el que allá lejos muestre todo el gordo que vendrá y una reposición que dicho por todos, está más barata que nunca.
Carlos Bodanza
Para Radio Colonia y Campo Total Web
Infosudoeste
